NO AL DESALOJO DE LA ASOCIACIÓN
DE VECINOS DE LA PROSPE
La Asociación de Vecinos Valle-Inclán de Prosperidad lleva cuatro décadas en el barrio realizando una importantísima labor de cohesión social y de defensa de los intereses vecinales. El gobierno de la Comunidad de Madrid, con la complicidad de la Junta Municipal de Chamartín, lejos de reconocer y favorecer esta labor, la entorpece tratando de echarnos del local.
La Comunidad de Madrid trata de imponer un modelo social caracterizado por el individualismo y el mercantilismo, (privatización de la sanidad y la enseñanza, debilitamiento de los movimientos sindicales y vecinales, etc.) frente a opciones colectivas y solidarias. Por eso nos hablan que ante la crisis económica necesitan desalojarnos del local que nos tienen cedido. Es como si nos dijeran que ante la crisis económica, tienen que eliminar la democracia porque es cara. La participación ciudadana no es cara ni barata, es una condición esencial para la resolución colectiva de los conflictos.
La democracia es mucho más que la representación a través de los partidos políticos. Los movimientos sociales y ciudadanos son un elemento esencial de la participación de los ciudadanos en la preocupación por sus asuntos, es decir en la vida política real. Las asociaciones de vecinos son declaradas un bien democrático por la Constitución y por el Consejo de Europa. Por tanto es un deber del Estado el apoyo a estos movimientos para que puedan desarrollar su labor de intervención social sobre la realidad recogiendo en el día a día las preocupaciones e inquietudes de los ciudadanos y ciudadanas más allá del acto ritual de introducir una papeleta en una urna cada 4 años.
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